Eco
Es en realidad el efecto Rebote de la voz sobre una superficie en un principio, pero en la actualidad la palabra ha encontrado muchas salidas en otros ámbitos de la vida social, así por ejemplo hablamos de los "ecos sociales".
Con semejante significado se puede interpretar la vida de muchas maneras y somos nosotros los que debemos saber reconocer cual es en verdad la nota que están emitiendo o cual la reverberación que seguramente nos despista.
A día de hoy la noticia ya no es el "virus" sino todas las "des-informaciones" que hay alrededor de "él" y que sin control están alterando la vida en el grupo social como en la propia intercomunicación de los países.
El problema viene de una mala interpretación de informaciones porque no se ponen sobre la mesa todos los datos con los que se está sorteando está "situación caótica" que descubrimos cada mañana.
Ahora se habla de "Segunda ola" y se está programando un plan que de momento no está funcionando debidamente en ciertos lugares o sistemas dentro de los "grupos elegidos". Acaso haya "Una Tercera".
Como generalidad se están planteando unas pautas muchas veces discutidas pero en realidad nunca aceptadas porque el conjunto mayoritariamente se ha decidido por la tendencia del "rebaño" o la "manada".
Una postura cuando menos poco meditada porque como las moscas tras el cristal solo saben estamparse en la realidad "desconocida y transparente" que la separa del exterior y de su libertad.
Con semejante locura de continuos "impactos" ante lo desconocido, nadie ha sido capaz de darle un quiebro y buscar la salida un "poco más allá" además de un pensamiento "univoco" en la "Vacuna Milagro".
Cualquier virus como en la informática tiene una "puerta de atrás" y todavía nadie se ha molestado en buscarla o se lo ha callado "inmoralmente" cometiendo un delito de "lesa humanidad" que como en las noticias de hoy, se reconocen semejante atrocidad en 2014 en Venezuela.
Cuando nos venga el "Eco" de este virus deberemos esperar como es debido a dentro de unos cuantos años o una década para que la responsabilidad caiga sobre los que ya se saben son responsables de "errores de lesa humanidad".
Además de todo el daño ocasionado por las "perdidas humanas" hay que valorar que otros enfermos continúan con secuelas y que a la sociedad la han puesto patas arriba como les ha dado la gana "al poder" sin ningún tipo de responsabilidad sobre sus espaldas sino en la de cada ciudadano.
Olvidemos los "Ecos" y busquemos "la fuente"
HASTA PRONTO
